miércoles, 11 de julio de 2012

EL ABORTO: SUS SECUELAS PSICOFISIOLÓGICAS COMPROBADAS

La Medicina entiende por aborto toda expulsión del feto, natural o provocada, en el período no viable de su vida intrauterino, es decir, cuando no tiene ninguna posibilidad de sobrevivir. En el lenguaje corriente, aborto es la muerte del feto por su expulsión, natural o provocada, en cualquier momento de su vida intrauterino. El aborto es provocado, se realiza matando al hijo en el seno materno o bien forzando artificialmente su expulsión para que muera en el exterior.
En ocasiones se actúa sobre embarazos de hijos viables, matándolos en el interior de la madre o procurando su muerte después de nacer vivos. Esto no es, médicamente hablando, un aborto, muchas legislaciones lo incluyen en la figura del infanticidio.
Secuelas psíquicas del Aborto

 1.      NECESIDAD DE TRATAMIENTO PSICOLÓGICO:
Un estudio realizado sobre pacientes post-aborto a sólo 8 semanas de haber abortado, los investigadores hallaron que el 44 % se quejaba de trastornos nerviosos, el 36 % había sufrido alteraciones del sueño, el 31 % tenía arrepentimientos por la decisión tomada y al 11 % le habían sido prescritos fármacos psicotrópicos por su médico de cabecera.  Un estudio de cinco años en Canadá detectó que el uso de los servicios médicos y psiquiátricos era sensiblemente mayor el 25 % entre mujeres que habían abortado frente al 3 % del grupo de control. Hay sentimientos reprimidos que son susceptibles de causar afecciones psicosomáticas y psiquiátricas o de conducta.

2.      TRASTORNOS POR ESTRÉS POST-TRAUMÁTICO:
Un importante muestreo concluyó que al menos un 19 % de mujeres que han abortado padecen trastornos por estrés post-traumático (PTSD). Aproximadamente la mitad presentaba muchos de los síntomas, aunque no todos, y entre un 20 y un 40 por ciento mostraban niveles de estrés que fluctuaban entre moderados y altos. El PTSD es una disfunción psicológica que anula los mecanismos normales de defensa de una persona, derivando en miedo intenso, sensación de estar atrapado, o en pérdida del control. El riesgo se incrementa cuando es percibido con amenazas de lesión física, violación sexual o presencia personal o participación en una muerte violenta. Hay  varias razones para que esto ocurra, entre ellas forzadas por maridos, novios, padres u otros

3.      DISFUNCIÓN SEXUAL:
Entre un treinta y un cincuenta por ciento de mujeres que han abortado declaran sufrir disfunciones sexuales, tanto de breve como de larga duración, que comienza inmediatamente después de sus respectivos abortos. Pueden incluir uno o varios problemas: ausencia de placer en las relaciones, dolor añadido, aversión al sexo o a los hombres en general, o desarrollo de una forma de vida de tipo promiscuo.  

      4.      PLANTEAMIENTOS SUICIDAS E INTENTOS DE SUICIDIO:
Aproximadamente un 60 por ciento de mujeres que experimentan secuelas post-aborto declaran albergar ideas suicidas, con un 28 por ciento que intenta realmente suicidarse, de las cuales la mitad lo ha hecho en dos o más ocasiones.  La tasa de suicidio dentro del año posterior a la práctica del aborto era tres veces más alta que la tasa general femenina, siete veces más elevada que para las mujeres que llevan a término su embarazo, y casi el doble de alta que la de las mujeres que habían sufrido un aborto por causas naturales.  

5.      REFUERZO DEL HÁBITO DE FUMAR CON LOS CORRESPONDIENTES EFECTOS NEGATIVOS PARA LA SALUD:
6.      ABUSO DEL ALCOHOL Y  DE LAS DROGAS:
7.      DESCUIDO DE LOS NIÑOS O CONDUCTA ABUSIVA HACIA ELLOS, DIVORCIO Y   PROBLEMAS CRÓNICOS DE RELACIÓN:
8.      MUERTE:
Las primeras causas de muerte en relación con el aborto son hemorragia, infección, embolia, anestesia, y embarazos ectópicos sin diagnosticar. El aborto legal constituye la quinta causa de muerte de gestantes en los EE. UU, aunque de hecho se sabe que la mayoría de muertes relacionadas con el aborto no son registradas oficialmente como tales.
 
9.      CÁNCER DE MAMA:
El riesgo de cáncer de mama casi se dobla después de un aborto e incluso se incrementa aún más con dos o más abortos.

10.  CÁNCER DE OVARIOS, HÍGADO Y CUELLO UTERINO:
Las mujeres con un aborto se enfrentan a un riesgo relativo de 2.3 de cáncer cervical, en comparación con las mujeres que no han abortado. Estos porcentajes se incrementan por  la interrupción no natural de los cambios hormonales que acompañan al embarazo, así como a la lesión cervical no tratada.  

       11.  PERFORACIÓN DE ÚTERO:
Entre un 2 y un 3 % de las pacientes de aborto pueden sufrir perforación del útero; es más, la mayoría de estas lesiones quedarán sin ser diagnosticadas ni tratadas. El daño en el útero puede complicarse en ulteriores embarazos y eventualmente puede acarrear problemas que requieran una histerectomía, lo que de por sí puede conllevar diversas complicaciones adicionales y lesiones que incluyen la osteoporosis.

12.  DESGARROS CERVICALES (cuello del útero):
En al menos un uno por ciento de abortos realizados en el primer trimestre se producen importantes desgarros cervicales que requieren sutura.

       13.  PLACENTA PREVIA :
El aborto incrementa el riesgo de placenta previa en ulteriores embarazos (una circunstancia que pone en peligro tanto la vida de la madre como su embarazo deseado), en una escala de entre siete y quince.
       14.  RECIÉN NACIDOS DISCAPACITADOS EN POSTERIORES EMBARAZOS:El aborto se asocia con lesiones cervicales y uterinas que pueden incrementar el riesgo de parto prematuro, complicaciones en el parto y desarrollo anormal de la placenta en posteriores embarazos. Estas complicaciones reproductivas constituyen las causas principales de las minusvalías en recién nacidos.  

15.  EMBARAZO ECTÓPICO:
El aborto está relacionado de forma importante con un riesgo añadido de embarazos ectópicos posteriores. Los embarazos ectópicos, a su vez, amenazan la vida y pueden llevar a un descenso en la fertilidad.  
       16.  AFECCIÓN INFLAMATORIA PÉLVICA
Aproximadamente un 5 % de pacientes que no han sido infectados por clamidia desarrollan dentro de las 4 semanas posteriores a un aborto realizado durante el primer trimestre.

       17.  ENDOMETRITIS:
La endometritis representa un riesgo post-aborto para todas las mujeres, pero en especial para las adolescentes, las cuales tienen una probabilidad 2.5 veces mayor de contraer endometritis después de un aborto que las mujeres con edades entre 20 y 29 años.

18.  COMPLICACIONES INMEDIATAS:
Alrededor de un 10 % de mujeres que se someten a un aborto provocado sufrirán complicaciones inmediatas, de las cuales aproximadamente un quinto (2 %) tienen la consideración de riesgo mortal. Las nueve grandes complicaciones más comunes que pueden darse durante la práctica del aborto son: infección, efusión excesiva de sangre, embolia, desgarro o perforación del útero, complicaciones de la anestesia, convulsiones, hemorragia, lesión cervical y "shock" endotóxico. Las complicaciones 'menores' más comunes incluyen: infección, efusión de sangre, fiebre, quemaduras de segundo grado , dolor abdominal crónico, vómitos, problemas gastro-intestinales, y sensibilización del Rh  .
La cuestión del aborto provocado, ¿es sólo un problema científico, político o social? Ciertamente, no. Esta cuestión es, desde luego, un problema científico, político y social grave. Pero también es, y en gran medida, un serio problema moral para cualquiera, sea o no creyente.  Continuara…

Fuentes: ACI PRENSA Y PRO VIDA INTERNACIONAL