Durante el rezo del Ángelus Francisco recordó con dolor los atentados de
los últimos días en Bagdad y Dacca, en los que más
de 150 personas perdieron la vida a manos de los terroristas.
FRANCISCO
"Exprimo
mi cercanía a los familiares de las víctimas y a los heridos por el atentado
que ocurrido ayer en Dacca y también en Bagdad. Recemos juntos. Recemos juntos
por ellos, por los difuntos y pidamos al Señor que convierta el corazón de los
violentos cegados por el odio”.
Minutos antes, desde la ventana de los apartamentos pontificios,
Francisco había lanzado un desafío a los jóvenes. El Evangelio del día
recordaba el momento en el que Jesús envió a 72 discípulos a
predicar por las aldeas vecinas.
FRANCISCO
"Y
me pregunto, escuchad la pregunta: ¿Cuántos de vosotros jóvenes, que ahora
estáis presentes en la plaza, sentís la llamada del Señor a seguirlo? No
tengáis miedo. Sed valientes y llevad a otros esta llama del celo apostólico
que nos han dado estos ejemplares discípulos”.
Para el Papa el mes de julio será un período de trabajo de puertas
adentro. Hasta la JMJ prácticamente no tendrá actos públicos.
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