Las
dificultades nunca faltan, pero es necesario no desanimarse ni ceder al
pesimismo en el difundir en el mundo la alegría de la Palabra del Señor,
también a través del compromiso de los niños. Es la exhortación que Papa
Francisco dirigió a los participantes en el IV Congreso Misionero Nacional
promovido por la Conferencia Episcopal italiana. A todos el Pontífice ha
recordado que “el Evangelio de Jesús se realiza en la historia” y que el Hijo
de Dios primero fue “un hombre de la periferia”, lejano de los “centros de
poder”, pero cercano a los “pobres, a los enfermos, a los pecadores, a las
prostitutas”. Y la Iglesia, también hoy quiere compartir este tesoro, esta
revolución espiritual y humana. Sali
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