Para el Papa las misiones ocupan un puesto de primera línea en la Iglesia y
de su eficacia depende su renovación. Lo ha dicho a los participantes en la
Asamblea General de las Obras Misionales Pontificias.
FRANCISCO
"Tiene prioridad la misión
evangelizadora porque la actividad misionera es todavía hoy el máximo desafío
para la Iglesia. Cómo querría encontrar, también para vosotros, palabras que
animen una etapa evangelizadora más fervorosa”.
También les dijo que para que las misiones sean eficientes y creíbles deben unir
el anuncio del Evangelio a la promoción humana. Les advirtió
que no caigan en la tentación de convertirse "en una ONG”, en una mera
oficina de distribución de subsidios. Los fondos, señaló, ayudan, pero también
pueden convertirse en la ruina.
Las Obras Misionales Pontificias
apoyan económicamente a las misiones en regiones y ámbitos no cristianos. Nacieron
para ayudar en la primera evangelización y a la promoción social de las
poblaciones locales.
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