El buen tiempo regresa a Roma y con
él las grandes concentraciones de peregrinos que vienen a ver al Papa a la
tradicional audiencia general de los miércoles.
Entre todos los peregrinos destacó
este grupo que amenizó el paseo del Papaentre la gente con
su música. Tanto debió gustar al Papa este gesto que antes de comenzar su
catequesis se acercó a saludarlas.
Francisco reflexionó sobre los desafíos de la educación de los hijos, en lo difícil
que es encontrar equilibrio entre el cariño y la exigencia, especialmente en
algunos casos.
FRANCISCO
"Es todavía más difícil para los
padres separados, a quienes pesa su condición. Han tenido dificultades, se han
separado y tantas veces el hijo se convierte en un rehén. El padre le habla mal
de la madre y la madre le habla mal del padre. Y se hace mucho daño”.
Francisco no entró a valorar el por
qué de la separación y mucho menos en condenar su estado. Habló de los hijos y
de cómo hay que cuidar su dimensión afectiva en casos tan delicados como este.
FRANCISCO
"A vosotros, matrimonios
separados, os aconsejo: Nunca, nunca, nunca, uséis a vuestro hijo como rehén.
Estáis separados por tantas dificultades y la vida os ha puesto esta prueba.
Pero que los hijos no carguen con el peso de esta separación”.
Francisco señaló que es necesario que
los padres reasuman su rol en la educación de los hijos. Son ellos quienes
deben llevar la mayor parte del peso y no es bueno que deleguen en los
profesores, expertos o intelectuales la formación de sus hijos.
FRANCISCO
"Privados de su rol, los padres se
sienten culpables y se vuelven posesivos en su relación con los hijos, hasta el
punto de no corregirles nunca. FLASH. Tienden cada vez más a confiar a sus
hijos a los expertos, hasta en los aspectos más delicados y personales de su
vida, quitándose de en medio, y así los padres corren el riesgo de
autoexcluirse de la vida de sus hijos, y esto es gravísimo”.
Al terminar la audiencia Francisco
renovó su llamamiento por el derecho a la libertad religiosa.
Recordó que el próximo domingo es la jornada de oración por
los católicos de China y que el sábado por la noche los obispos
italianos convocaron una vigilia de oración por los
cristianos perseguidos en todo el mundo. Francisco dijo que la
persecución de cristianos es un drama de nuestro tiempo y un crimen
inaceptable.
No hay comentarios:
Publicar un comentario