"¡El Dios Viviente nos hace libres! Digamos sí a Dios que es amor,
vida y libertad". Es el llamamiento del Papa Francisco en la celebración
de hoy en la Plaza de San Pedro, con más cien mil fieles, en el Año de la Fe,
dedicado a la encíclica del Beato Juan Pablo II, Evangelium Vitae. A las
personas que en todo el mundo promueven la vida humana, señaló que a menudo el
hombre no elige la vida, no acoge el «Evangelio de la vida» y se deja guiar por
ideologías y lógicas que obstaculizan la vida, no la respetan, dictadas por el
egoísmo, el poder, el placer, y no por el amor. La nueva Torre de Babel, con el
rechazo de Dios y del Evangelio
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